
Admito que me enfrento a la posibilidad de que no me crean cada palabra escrita en esta hoja
atiborrada de sufrimientos y borrones por inconformidad el pulso de mi mano es inquientante
no se que tanto escribo las ideas se agolpan en mi cerebro queriendo salir todas al mismo
tiempo la vela que me alumbra se agita ante mi provocando sombras que parecen ser hijas
de terrores que emanan de este lugar tetrico se escucha el silencio y mi respiracion se hace cada
vez mas debil tengo sed mucha sed pero no bebere de ese vaso que me espera cuyo contenido
envenenado doblegaria los ultimos vestigios de mi joven e inmadura integridad dios, dios por que me entrego a esta pausa absurda y desembocante reflexion tal caos causa en mis pensamientos
que las sensaciones son amargas y la desbordada locura que se acerca nada de esto impedira que en cualquier instante llege a mi la muerte